- Con la llegada de la Pascua, las clases de educación infantil han buscado esta mañana al Conejo de Pascua por su patio, que estaba lleno de coloridos huevos de chocolate.
Con la llegada de la primavera ha llegado también la Pascua. Esta mañana las clases de infantil se encontraban con una sorpresa: ¡un gorro pequeñito! Después de mucho pensar llegaron a una conclusión, solo podía ser de un ser pequeño que suele aparecer en esta época del año. Por supuesto, estamos hablando ni más ni menos que… ¡del Conejo de Pascua!
Con mucha emoción, después de planificarlo entre las tres clases, salieron todos al patio a investigar y buscar cualquier detalle que les diera una pista sobre dónde podría estar el Conejo de Pascua. Finalmente, el conejo no apareció, pero estamos seguros de que pasó por nuestro cole porque el patio estaba lleno de huevos: grandes, medianos y pequeños. Aunque, eso sí, el conejito era un poco bromista y, no sólo dejó huevos de chocolate, sino que tuvieron que fijarse muy bien y distinguirlos una vez guardados todos en la cesta.
Como broche final de la actividad, terminaron la mañana llevando para casa uno de esos huevos encontrados hoy con una linda bolsa de conejito. No hay duda de que los misterios de nuestro cole son la mar de divertidos y, en este caso, muy, muy ricos.